miércoles, 28 de septiembre de 2011

HÁGASE EN MÍ TU VOLUNTAD


ABRAZA "TU CRUZ" CON ALEGRÍA

Cuando las circunstancias nos son favorables es muy fácil creer en Dios y alabarle. Pero es en los momentos díficiles, en los que la vida nos pone a prueba nuestra fe, dónde nos daremos cuenta verdaderamente si somos o no cristianos por nuestra forma de actuar. Los pensamientos negativos proceden del demonio ya que su deseo es alejarnos de Dios y cuánto más lejos mejor. Lo que hay que tener claro es que Dios siempre está amorosamente esperando un acercamiento. Dios invita a todos y a los más pecadores especialmente. Cada día se ven más conversiones de personas que estaban muy alejadas, esto es una señal de la que se deduce que la verdadera fuente de felicidad y paz sólo se encuentra en una experiencia de amor a Dios y al prójimo como a uno mismo. El bien llama al bien, a sentirse bien. Quien se deja caer o se pone en manos de Dios porque confía en Él plenamente: lo primero que siente es alegría pese a cualquier circunstancia. Las dificultades en la vida son las que nos hacen crecer espiritualmente. Dios nos da todo lo que necesitamos, todo su amor.

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