3. Nacimiento
de Jesús en Belén
Ya falta poco para que nuestro Salvador venga al mundo.
María y José ya tienen todo preparado en su humilde casa de Nazaret para recibir
a Jesús. Me imagino con cuanta ilusión hizo José en su taller una buena cuna
para el Niño.
Pero un día llega al pueblo la noticia de que todo el mundo
debe empadronarse. Lo manda el emperador romano. Como José procede de Belén,
allá tienen que ir. No les queda más remedio que dejar en Nazaret casi todo lo
que tienen y emprender un largo y penoso camino.
Me imagino a María, camino de Belén, sentada sobre el
borriquillo, con el gozo inmenso de saber que lleva en su seno al Hijo de Dios.
Y a José, joven, alegre y animoso, con el ronzal en una mano y el cayado en la
otra, volviendo la cabeza de vez en cuando para preguntarle a su esposa si va
bien, si se encuentra cansada, si prefiere detenerse un rato...
Después de mucho caminar llegan a Belén. Buscan por todas
partes y no encuentran un lugar adecuado para el nacimiento del Hijo de Dios: “No hubo lugar para ellos en la posada”.
¡Qué pena da leer estas palabras en el Evangelio!
No queda más remedio que elegir una cueva, un establo de
animales, a las afueras del pueblo. José se ocupa de limpiar y preparar aquel
lugar lo mejor que puede, enciende una pequeña hoguera, y se preocupa de que su
esposa esté lo más cómoda posible. Y María sonríe y acepta con alegría la
voluntad de Dios. Jesús podría nacer en un palacio, pero quiere nacer en un
establo...
Y estando allí, Madre mía, te llega la hora del parto, y das
a luz a Jesús; lo envuelves en pañales y lo recuestas en un pesebre. Tú y José lo adoráis, lo llenáis de
besos, lo abrazáis, lo envolvéis en vuestro cariño...
Yo me acerco a María y le pido que me deje tomar a Jesús en
mis brazos. Lo miro, lo beso, lo aprieto contra mi corazón y le digo: “¡Te
quiero, Jesús! Gracias por hacerte Niño. Quiero hacerme niño. Quiero ser, sobre
todo, humilde. Quiero amarte por todos los que no te aman, tal vez porque no te
conocen. Quiero tenerte siempre conmigo y no dejarte nunca. Tú te entregas por
mí, naces por mí y morirás en una Cruz por mí. Yo quiero entregar mi vida por
Ti”.
(Autor: D. Tomás Trigo)
Si tuviese a Jesús en mis brazos le diría: " Me alegro mucho que hayas venido al mundo " y quiero pedirte una cosa que nunca me dejes solo.Tambien le abrazaria fuertísimo y le daria un montón de besos y que es un honor ser tu amigo y espero que todas las personas piensen lo mismo.
ResponderEliminarYo si tuviera a Jesús en brazos le diria: que quiero ser muy buen niño, que estoy muy contento por tenerle en mis brazos , por creer en él. Le daría un abrazo y un beso y estar siempre con él y no separarme nunca. Le diría también que quería saber mucho mas de él y decirle que gracias por crear este mundo tan bien hecho.
ResponderEliminarHola Jesus que mono eres <3
ResponderEliminarGracias por ser nuestro salvador :)
Que pena que no puedas estar aquí conmigo ,jugariamos un montón en el patio del cole y te presentaria a mis amigos:Lacri,Alicia,Gabriel,Lorena etc...
Si tuviera a Jesús en mis manos, me gustaría que fuera mi amigo físicamente, también rezaría por toda mi familia y amigos.
ResponderEliminarTambién estaría con él la mayoría del tiempo.
Se lo enseñaría a todo el mundo y le pediría suerte en los exámenes.
Me ha parecido muy bonita la historia porque habla de Jesús y de sus padres. Yo me acercaria a Maria y le pediría que me deje coger en mis brazos a Jesús para abrazarlo, acariciarlo y darle muchos besos.
ResponderEliminarY le diría del fondo de mi corazon que le quiero mucho y gracias por venir al mundo.
Y le diria a mi maestra Elena que ha sido de su parte muy bonito que publicara esta historia tan bonita y bella de Jesús.
El autor lo explica muy bien . Me ha dado mucha pena cuando leí:
ResponderEliminar“No hubo lugar para ellos en la posada”
Si yo tuviera a Jesús en mis brazos le diría:
dale salud y suerte a mi família y le daría un fuerte abrazo, pero aparte de eso, el texto me ha encantado, espero que la maestra de religión Elena ponga en su blog más textos como estos porque son muy bonitos.
Es muy bonito y me parece genial , todo lo que dice es muy cierto y de hecho yo pienso lo mismo.Lo mas bonito es lo de el final me ha gustado mucho haberlo leido, ademas,yo tengo muchas ganas de que venga la Navidad porque aparte de que me encanta es la época mas bonita de todas.Jesus nacio en un simple pesebre,con una mula pero desde luego a mi me parece precioso.
ResponderEliminarYo le diria a Jesús que muchas gracias por todo, por cuidarme cuando lo necesitaba y por estar a mi lado siempre
A mi el texto me ha parecido muy bonito pero me ha dado mucha pena quando lei :
ResponderEliminar"que no tenia sitio en la posada"
Yo le diria;
Que cuidase de mi familia y a mis amigos para que no les pase nada y tambien le daria un fuerte abrazo .
La historia es muy bonita, ademas vivir en un establo y criar a un niño que sería nuestro salvador eso sí es dificil. Si yo tuviera a Jesús en brazos le diría: "Por favor llévame a mi, a mi familia y a todos a los que amo al reino de Dios para hacer el bien ,solo el bien y nada mas que el bien" y le daría un fuerte abrazo . P.D Que lleguen textos tan bonitos como estos x3
ResponderEliminarJesús yo te quiero como hermano y como amigo eres muy especial en mi vida y en mis creencias, eres precioso y quiero que pases el resto de mi vida a mi lado y que me quieras como una hermana al igual que yo te quiero a ti, serias mi hermano pequeñin y al que mas querria en este mundo junto a mi familia y a mis amigos TE QUIERO JESUS
ResponderEliminarMe ha parecido muy bonita la historia porque habla de Jesús y de sus padres. Si yo hubiera estado allí le hubiera preguntado a la Virgen Maria si me lo deja abrazar y decirle unas oraciones,que serian: "Haz que en el mundo entero reine la paz, que haya alegría para todos y que yo, mis familiares y conocidos tengamos suerte y podamos galopar hacia la luz del amor y la felicidad eterna.
ResponderEliminarCon amor JEREMY
A mi me ha emocionado un poquito porque es una pena que no tenga lugar para ellos pero aun así todo ha salido muy bien. Si yo tuviera a Jesus en mis brazos, le diria que gracias por todo lo que has hecho por nosotros.
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