Amigo Jesús: aunque soy pequeño,
Tú confías en mí para cambiar el mundo,
convirtiendo en gestos misioneros
las cosas sencillas de cada día.
Tú me invitas a compartir
y a pensar en los demás;
a rezar con confianza
y a hablar de Ti a mis amigos;
a ser un niño que ayuda a otros niños,
alegre, agradecido y generoso.
Tu Madre, la Virgen María,
nos enseñó a hacer lo que Tú nos digas.
Por eso, yo quiero escucharte y seguirte,
y ayudar a que te conozcan mis hermanos,
los niños de los cinco continentes.
Te pido que me ayudes a lograrlo
por medio de Santa Teresa del Niño Jesús,
Patrona de las Misiones.
Tú confías en mí para cambiar el mundo,
convirtiendo en gestos misioneros
las cosas sencillas de cada día.
Tú me invitas a compartir
y a pensar en los demás;
a rezar con confianza
y a hablar de Ti a mis amigos;
a ser un niño que ayuda a otros niños,
alegre, agradecido y generoso.
Tu Madre, la Virgen María,
nos enseñó a hacer lo que Tú nos digas.
Por eso, yo quiero escucharte y seguirte,
y ayudar a que te conozcan mis hermanos,
los niños de los cinco continentes.
Te pido que me ayudes a lograrlo
por medio de Santa Teresa del Niño Jesús,
Patrona de las Misiones.
(Fuente: infanciamisionera.es)
No hay comentarios:
Publicar un comentario